Instituto de Estudios del Antiguo Egipto
Sin duda, hay mucho talento.
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Dos jóvenes malagueñas estudiantes de la Universidad participarán en dos proyectos tan importantes como diferentes. Las dos no se conocen de nada, pero tienen en común que están consideradas como ‘jóvenes talentos’ en sus especialidades, para ellas apasionantes. Una, Irene, se nos va a Cambridge becada en un proyecto tecnológico de primer nivel; la otra, Marina, se va a Luxor, en Egipto, a excavar y buscar restos de la cultura faraónica. Dos malagueñas con un futuro inmenso que en estos días, como otros muchos becados, hacen sus maletas que se van más cargadas de ilusiones que de cualquier otra cosa, y ven cómo se cumplen sus sueños, los mismos que tienen desde su infancia, porque como dice Marina, «mis muñecas eran momias y faraones…».
Vayamos por partes. La malagueña Irene Gutiérrez Alcoba, ingeniera de Telecomunicaciones por la Universidad de Málaga, de 26 años de edad, es la única mujer del grupo de diez jóvenes talentos seleccionados de toda España para participar en un proyecto de innovación tecnológica en Cambourne, cerca de Cambridge (Gran Bretaña), que comenzará en unos días.
Irene, que viajó para Londres el pasado jueves por la noche, se muestra tan feliz como emocionada por el reto, pero también por la gran oportunidad que se le presenta al trabajar en el programa Labs desarrollado por Telefónica y Mediatek en la sede de ésta última en el Reino Unido. Irene, que posee un brillante curriculum académico, había sido becada anteriormente por Wayra, la aceleradora de Telefónica, y ha trabajado en varios proyectos del programa Talentum Startups y Talentum Schools de esta multinacional española.
Los diez estudiantes de ingenierías españoles, de entre 21 y 28 años de edad, desarrollarán diversos proyectos relacionados con las áreas de Internet de las Cosas (IoT) y dispositivos ‘wearables’ con soporte de las tecnologías y plataformas de Mediatek. En concreto, la malagueña Irene Gutiérrez trabajará sobre un reto tecnológico, con un tutor durante 6 meses, participando en el proceso completo: desde que nace la idea, se crea su información técnica, hasta que se conecta con la industria para convertir los inventos en negocios.
«Estoy más que contenta», afirma Irene, quien explica el ‘desfase’ del grupo entre el número de chicos (9) y chicas (solo ella) «porque la presencia femenina en las carreras tecnológicas es todavía inferior a la masculina».
Sigamos. La segunda joven talento malagueña, Marina Esteve, de 23 años, que termina Historia del Arte en la Universidad de Málaga y que ha iniciado estudios de Egiptología en Manchester, que se va a ese paraíso para todos los amantes de su especialidad como es Luxor (Egipto), becada por la empresa malagueña de gestión cultural Esirtu, que colabora con el Instituto de Estudios del Antiguo Egipto que dirigen Teresa Bedman y Francisco Martín Valentín.
La beca cubre el viaje y la estancia de Marina Esteve en Egipto que comienza el 2 de octubre y termina el 20 de diciembre. Las especialidades de la malagueña son antropología física y momificación, ejerciendo funciones de arqueóloga. El año pasado el becado por Esirtu fue Daniel González, también estudiante de Historia en la UMA.
Para Mariano Vergara, director de proyectos de Esirtu, «el motivo de que apostemos por la beca se inicia al conocer a Teresa Bedman y Martín Valentín, nos hablaron con tanto entusiasmo de egiptología que nos animamos a participar. Además, en un futuro tenemos intención de organizar una exposición de arte egipcio en Málaga».
Marina Esteve es la segunda ocasión que acude a Luxor y recuerda que «fue una experiencia muy bonita. El proyecto está ofreciendo muy buenos resultados, es totalmente español, y doy las gracias a Esirtu porque es un ejemplo en patrocinio que deberían continuar otras empresas privadas», declara la becada. Marina habla con pasión del proyecto: «La egiptología me gusta desde que era una niña, jugaba con momias y faraones, es una vocación desde siempre».